Era Francesc Gironés un pintor del Poblenou del que poco se sabe, se cree que nació en el 1904, y murió en el 1997. Fue uno de los primeros en pintar la emblemática Torre de les Aigües y su estilo derivó hacia un cubismo surreal próximo al lenguaje mágico del Dau al Set, pero siempre muy personal.
Había tenido un estudio en la calle Pere IV y compartía su actividad pictórica con su trabajo de diseño de estampados en la empresa textil del barrio, Can Ponsa . Debido a una enfermedad de su mujer tuvo que dejar el estudio y desde entonces pintaba en su casa de la calle Recaredo (hoy desaparecida), en un ambiente que recrea su joven amigo, el pintor Gonçal Sobré, que lo consideraba un “surrealista de barrio”:“ En la calle Recaredo, hay un piso muy pequeñito y hay un cuarto muy pequeñito y oscuro, la luz baja del techo con una capucha de cartón de caja de zapatos que como un foco enfoca una mesita y una sillita; el resto todo son cajas con pinturas y tintes, y sentado en la silla de siempre, siempre arropado con una bata de estar por casa, el Sr Francesc Gironés, el anciano pero joven pintor mundialmente desconocido, pero a pesar de todo surrealista y muy surrealista, autor de una obra extraña, con símbolos, significados, documentos de unos mundos oníricos muy personales y pintados con unas lacas de no sé qué creo que de teñir en el ramo del agua, que nunca se secan del todo y la obra queda como pegajosa dando esa sensación de lascivia y misterio de interés sexual. Pinta estrellas hombre, y flores mujer, escenarios Chiricoiformes, colores primitivos, composiciones calculadísimas de geometría.”*
Se le conoce una exposición en la Galería Beaubourg de Barcelona en 1978 y su participación en una colectiva de artistas catalanes en San Francisco en el año 1987.
* Sobré, Gonçal. Surrealistas catalanes de barrio , Artes Plásticas nº 5 (Feb.1976), p. 54-55
* Sobré, Gonçal. Surrealistas catalanes de barrio , Artes Plásticas nº 5 (Feb.1976), p. 54-55